En la cima con la droga

"Pambele", palenquero dos veces  Campeón Mundial.

Antonio Cervantes o "Kid Pambele", el más grande en el mundo del boxeo, es una clara muestra de las personalidades  que hoy por hoy llegan a la cima ganando  reconocimiento nacional e internacional, después de enfrentar problemas de grandes necesidades económicas, viviendo en la pobreza y explotando su talento, se enfrentan a un mundo quizás audaz, el mismo que les ha permitido a muchos alcanzar sus sueños; sueños que quizás están llenos de bendiciones o  por lo contrario para algunos terminan bañados en maldiciones.

 Para muchos, aún les era increíble que Cervantes fuera para ese entonces la  promesa del boxeo Colombiano,  decide salir de su natal San Basilio de Palenque para trasladarse a la ciudad de Cartagena, la cual le abrió una gran puerta para ir escalando y posesionándose frente a los demás peleadores, durante varios años entreno incansablemente para lograr uno de sus mas anhelados sueño, ser campeón mundial, el cual le otorgaron  en el año 1972, desde este entonces la época gloriosa se      avecino y con ella un trágico fin desencadeno.

Éxitos, alegrías, logros y fama terminaron en un mundo oscuro del cual son pocos los que han podido salir,  "Pambele" se hace esclavo de la droga volviéndose adicto, comenzó fumando mariguana, luego cocaína y bazuco, a partir de esta adicción  se transformo en una persona completamente destina, llegando hasta el punto de agredir de manera grave a una mujer en un bar en Cartagena.

Desde allí la  vida y el futuro que muchos vieron prometedor comienzo a venirse abajo como un edificio sin cimiento alguno; fueron años llenos de dolor después de haber estado en la cárcel y a la vez consumiendo droga sin cesar, más tarde  decide rehabilitar su vida y buscar ayuda profesional apartando sus malas influencias.

Lo logra después de una lucha ante esta fatal adhesión; el caso de este gran deportista lo podemos comparar con la vida del desaparecido Joe Arroyo, quien creció casi en las mismas condiciones de Pambele, ambos siempre soñaron con salir adelante, buscando un mundo lleno de comodidades, logros, gloria, satisfacciones  y fama,  esa misma fama que muchas veces incita a las personas a caer en ese ambiente negro que consume, los deteriora y los atrapa hasta adueñarse de sus vidas.